El millón de dólares será destinado íntegramente a los investigadores que puedan hackear el kernel (el epicentro de iOS), sin que el usuario tenga que hacer algún tipo de click para que sea activado.
También ofrecen 500.000 dólares a aquellos investigadores que sean capaces de hacer un "ataque a la red sin que se requiera la interacción del usuario". También existe una bonificación del 50% para aquellos que encuentren estos fallos de seguridad antes de que se lance el software oficialmente.